4 poemas góticos de amor y decepción

¿Conoces la poesía gótica? Esta forma de expresión fue muy popular en siglos pasados y, prueba de ello, son los numerosos poemas de escritores que nos han regalado momentos amargos y muy apasionados. Casi todos ellos hablaban acerca de sentimientos decadentes, amores no correspondidos u obsesivos y pasiones desenfrenadas, que transcurrían en construcciones antiguas como castillos medievales y monasterios. No obstante también podemos encontrar poemas góticos que nos hablan de sentimientos tiernos y dichosos.

poemas

Si quieres impresionar a esa persona que te gusta o simplemente disfrutar un rato, leyendo algo que vaya acorde con una situación amorosa que estes viviendo en este instante, lee los 4 poemas góticos y originales que recopilamos en el artículo de hoy para ti, de manera muy especial. Puedes dedícarselos a alguien único.

El rostro de un ángel

La llama que se ha encendido en mi corazón

impulsa cada una de mis palpitaciones con el fulgor de tu presencia

en esta vida mis penas se han visto recompensadas

tan solo con tu mirada posada en la nada que cubre mis ojos.

Rindo culto a cada una de las facciones de tu rostro

que hace mella en mí como la noche al exteender su manto de negrura

en cada uno de los rincones que habita mi imaginación

regodéandose en la sutileza del sentimiento

que tu pasión ha ocasionado en mí.

Invocó tu imagen en las horas más siniestras de mi existir

pues incluso tu voz es como un elixir que atenua mi agonía

deslizándose sin prisa en cada una de mis venas

mientras el eco del silencio se escucha a las puertas de mi locura.

Es tu boca una réplica del veneno más dulce que pueda existir

tu piel como de mármol ha quedado grabado en cada uno de mis sentidos

el destello de tus ojos refulge como fuego en la oscuridad

atrayéndome sin ningún reparo hacia el hechizo indómito

al que has logrado someterme.

No puedo escapar de la influencia de tus artimañas

solo tú sabes bien como apelar a mis instintos

tal es el apego que siento hacia ti de manera inevitable

que no deseo estar lejos del alcance de tus labios nunca.

Eres como una daga que se hunde en medio de mi pecho

robando hasta el último atisbo de aliento que me queda con vida

y al mismo tiempo brindándome la gozosa sensación

de saberme conteniendo cada una de tus intenciones y movimientos

me pierdo en el sonido de tu voz mientras la hora nocturna me llama.

El dolor de tu ausencia

Desperté incluso después de haber exhalado mi último suspiro

sentía mis entrañas desgarrarse ante la perspectiva de tu partida

la realidad se abalanzó encima de mí como una pesada sentencia

para recordarme que en los designios de la eternidad

tendría que enfrentarme al dolor de tu ausencia.

Eres como una maldición que pesa sobre cada una de mis lágrimas

el vacío es grande, se cierne sobre mi persona sin compasión

si tan solo pudiera devolver a mi mente aquellos recuerdos

en los que las espinas del rosal no se clavaban con tanta saña en mi piel

no me afligiría tanto el estigma con el que me dejó tu abandono.

Hay en mí una agonía tan profunda como inmensa fue mi pasión una vez

esta noche hasta los ángeles derramaran sus lágrimas a causa de mi aflicción

no conciliaré la paz con tu imagen viviendo en mis memorias

tal como un espíritu que vaga después de su propia existencia

purgaré esta pena hasta el fin de los días del mundo.

Te amé más de lo que mi propio corazón me permitió sentir por alguien

te quisé como el cielo llama a las estrellas al caer el velo nocturno sobre él

la ilusión se desvaneció en el último instante entre la niebla difusa

que provocaban mis propios pensamientos al saberte lejos de aquí

al encontrarme con la certeza de tu destierro.

En mi Oscuridad

En los rincones de mi oscuridad encontré tu reflejo

me sonrió a través del cristal que contenía la esencia de tu memoria

clara fue tu sonrisa como el brote de un arroyo

tu mirada un trozo del cielo nocturno que tan celosamente guardaba para mí

y tus manos un consuelo irreal.

Mientras contemplaba tu imagen oculta en aquel instrumento

me convencí de que eras la más bella de las ilusiones

acudiendo una vez más para aliviar mis noches de angustia

abriendo paso a la razón incierta en medio de la desesperación.

Escuché el sollozo de un ángel a lo lejos de mis horizontes

pero el temor a los designios divinos me había abandonado hace tiempo

tanto era el alcance de mi pasión por ti como para velar la razón;

pues el susurro de la tentación interrumpió mi silencio

y yo no me atemoricé ante ello.

Una vez más me he hallado al borde de la desolación

entre la delgada línea que separa la obsesión del recuerdo

y la caricia inocente de un amor ingenuo

del ansía contenida en un beso lleno de posesión.

Las horas pasan como una hoz que se cierne sobre mi cabeza

dejándome guiar por el sonido de una brisa helada que no había sentido antes

llevó mis pasos hacia las laderas tocadas por el Invierno

me dejó caer en medio de la nada desdeñosa

observando con adoración tu sepulcro.

Tu amor

Dame el calor de tus labios una vez más

brindame el toque sutil de tus manos mientras te deslizas junto a mí

en una danza que no terminará cuando la noche se vuelva eterna

y la mirada del firmamento sea nuestro único testigo

en el momento en que me pierda en los confines de tu amor.

Intenso es el sentimiento como la sangre que corre por nuestras venas

¿recuerdas el roce de mi piel contra la tuya,

cuando prometíamos perdurar junto al otro aún más allá de la muerte?

Es el mismo que nos ocupa en este momento en el que somos uno solo

en el que tu perfume llena todos mis sentidos.

No quiera el destino llevarme lejos de ti

puesto que no dejaría que la vida misma pusiera barreras entre ambos

te has convertido en el pilar que sostiene toda mi existencia;

palidezco pues al pensar, en la sola posibilidad

de ver como te apartas para siempre de mí.

Es la forma en la que ríes mientras te mueves como el viento

el saber que tus ojos me obsequiarán siempre ese remanso de paz

que solo puedo hallar cada vez que te diriges hacia mí,

y el atardecer despunta tornando el cielo de rojo

como cómplice secreto de nuestros encuentros.

¿Te han gustado los poemas góticos que escribimos para ti? Si es así eres libre de utilizarlos cuantas veces quieras. Cualquiera de ellos puede ser un bonito obsequio que impresionará a la persona con la que sueñas constantemente, o una prueba del amor que sientes hacia tu pareja, si ya pasaste por esa fase en la que lo más difícil es la declaración.

No olvides dejarnos tus comentarios acerca del material que subimos hoy; vamos a tomar en cuenta todas tus opiniones. Y sigue visitándonos en Amorteca, porque aún hay muchas cartas, poemas y frases que estamos esperando compartir contigo para que los disfrutes.