Alguna vez lo fuiste todo en mi vida
Hubo una vez en la que yo juraba que lo daría todo por ti y que lo que sentíamos no se iba a terminar nunca. No imaginaba que después tendríamos que ir por caminos muy distintos y que se me iba a partir el corazón en mil pedazos. Me he preguntado muchas veces si tú sentiste lo mismo en aquella ocasión. Por la mirada triste que vi en tus ojos, quiero pensar que sí, pero eso no es ningún consuelo. La vida tiene maneras muy injustas de demostrarte que no siempre puedes tener todo lo que quieres y que a veces, es necesario hacer ciertos sacrificios.
¿Cuántas veces lloré pensando en ti? Tratando de hacerme a la idea de que era lo mejor separarnos y de que con el tiempo, encontraríamos a alguien más que pudiera llenar el vacío que nos dejamos. No sé si tú lo hayas logrado, pero al menos yo, sigo sintiendo a veces que no lo hice. Traté de ser feliz. Me sentí de esa manera más de una vez y creí que te había superado.
Pero luego me volvía a acordar de ti y regresaba al punto de partida. No comprendo que fue lo que hicimos mal y porque no pudimos seguir juntos. Me pregunto que tan diferente habría sido todo de tener esa oportunidad. De verdad llegué a sentir que serías mi único amor. Tú me entendías como nadie más y me hiciste creer que nada era imposible. Tu mirada me bastaba para saber que todo iba a estar bien, aun cuando las cosas a mi alrededor se volvieran oscuras y amenazaran con quebrarme y hacerme llorar. Tú lo eras todo.
Alguna vez lo fuiste todo en mi vida pero ahora, solo me queda tu recuerdo y los momentos felices que vivimos en el pasado.