3 cartas de amor verdadero

Cuantas veces hemos escuchado hablar del amor verdadero, preguntándonos si es real o no. Si alguna vez has estado o estás enamorad@, te habrás convencido de que sin duda así es. Es pensando en esto que por esta ocasión, queremos compartir contigo tres cartas originales y muy especiales, que hablan acerca de la búsqueda de esa persona especial y como cuando la encontramos, la vida nos puede cambiar por completo. Un simple gesto puedo cautivar el corazón, no lo olvides. Perderse en la rutina, en lo común y cotidiano es el veneno de muchas relaciones. A veces un detalle como una carta escrita a mano puede recordarle a la otra persona por qué nos eligió a nosotros entre un océano de posibilidades. Esperamos que te guste leerlas y que te animes a compartirlas con quien para ti, es el dueño o la dueña de tu corazón.

Carta escrita a mano

No sabía lo que necesitaba, hasta que te encontré

Pase tantos días sintiendo que una parte faltaba en mi interior y preguntándome, por donde debía comenzar a buscar para descubrirla o que era exactamente. Siempre creí que podría disfrutar la soledad para siempre, pero llegó un momento en el cual me fue imposible y de repente, apareciste tú. Fue algo tan inesperado para mí, pero también muy afortunado; aunque al principio no entendía que estaba sucediendo.

Fueron muchos los sentimientos que entraron en mi corazón y que aún hoy, siguen estando ahí. Eres alguien tan especial, que a veces todavía no puedo creer que mi camino se haya cruzado con el tuyo.

Supongo que he tenido suerte de conocer lo que es el amor, aunque antes había dudado que fuera a ser así. El estar a tu lado es tan importante para mí, que solo espero que esto duré tantos años como sea posible, porque jamás podría cansarme de mirarte, de hablar contigo o hacerte compañía. Me complementas en todos los aspectos que me hacen falta y siempre sabes como hacerme sentir mejor, en los momentos difíciles. Hoy ya no sabría como seguir adelante si no estuvieras conmigo. Porque no tenía idea de que era lo que necesitaba, hasta que te encontré a ti.

Y no podría andar de la misma forma, si un día me faltarás. Eres lo más bonito que tengo.

Contigo aprendí lo que es amar

Dicen que el amor no es algo que terminas de conocer, sino que nunca terminas de aprender de él a lo largo de la vida. Creo que esto es cierto porque de otro modo, lo que tenemos habría terminado hace mucho tiempo. Pero cada vez que me miras, me siento aquella vez en que recién te conocía y despertaste mi curiosidad y mi corazón. Esa sensación es algo que no tiene precio y que no cambiaría por nada en el mundo.

Dudo que alguna vez me haya enamorado como lo estoy de ti en este momento. Dudo también que alguna vez me haya topado con alguien, que me haya ayudado tanto como tú. Tu forma de ser y de hablar, la manera en la que siempre sabes que decir para hacer que de lo mejor de mí en cada minuto; son solo algunas de las cosas que me han hecho quererte más que a nadie en el mundo. Me has mostrado que es posible querer estar una vida entera con alguien y que no importa cuantos obstáculos pueda haber en el camino, vale la pena enfrentarse a ellos por lo que compartimos.

Contigo he aprendido lo que es amar de verdad, a diferencia de tantas ocasiones en los que he creído sentir algo. Tú me haces feliz más allá de tu apariencia o tus acciones, que también me han enamorado. Pero lo que más me gusta de ti, sin duda, es que me has demostrado que me aceptas con todos mis errores y los defectos que tengo.

No sé como agradecerte por ello. Simplemente, te has convertido en un motivo más para vivir cada día como si fuera el último.

Tenerte en mi vida es lo mejor que me ha sucedido

Muchos dudan de la existencia de los amores verdaderos. Yo lo hice alguna vez, cuando observaba que nada sucedía a mi alrededor y me impacientaba por hallar a alguien que pudiera comprenderme, en todos los aspectos. Es increíble como las cosas resultan cuando menos te lo esperas. De pronto estabas ahí; seguro que tardé en darme cuenta, pero no pude ignorarlo por demasiado tiempo. Siempre habías estado ahí.

De un momento a otro, también reparé en que no sabía como afrontar los sentimientos que acababan de despertarse en mí. Estuviste frente a mí casi desde siempre y es increíble como antes, no había podido ver que eras la persona correcta para mi corazón. Sin embargo, todavía después de haber temido que jamás encontraría el amor con nadie; sentí más miedo de que resultará que tú no sentías lo mismo hacia mí. Me considero una persona lo suficientemente fuerte, pero la verdad es que no habría sabido lidiar con tu rechazo. Eres un ser tan único y especial para mí, que si te marcharas, yo ya no sería la misma persona. Has marcado un antes y un después en todos estos años.

Tenerte en mi vida es lo mejor que me ha podido pasar, porque definitivamente has hecho demasiado por mí; aunque no estés consciente de ello. El saber que es por ti por quien late mi corazón cada vez que te aproximas, es algo que siempre se siente como la primera vez y a lo que al mismo tiempo, me he acostumbrado y me ha hecho inmensamente feliz.

Gracias a ti he descubierto muchas cosas y siento que cada día, puedo ser mejor de lo que jamás he sido.