Encontrar a tu alma gemela
Todos en el fondo guardamos la esperanza de que en alguna parte del mundo, hay una persona destinada a complementarnos, a entendernos y amarnos tal y como somos, sin importar cuantas imperfecciones tengamos o todo lo que pueda suceder. A veces dudamos en encontrarla, porque nos toca vivir tantas desilusiones y ver tantos corazones rotos, que aun sin quererlo terminamos cerrándole las puertas al amor.
¿Por qué las búsquedas tienen que ser tan difíciles? ¿Por qué no es tan sencillo encontrar a esa persona única o que ella nos encuentre a nosotros? Quizá es porque no todo el tiempo estamos dispuestos a ver cerrando los ojos.
Y es que muchas veces, pasa que las cosas más esenciales no se dejan ver con tan facilidad o bien están allí y simplemente nos negamos a mirarlas. Dicen que el amor puede surgir en los momentos más inesperados y en lugares que no te imaginas. Pero estamos tan acostumbrados a idealizar el romance mismo, que no recordamos que las historias románticas que de verdad valen la pena, son aquellas que no son como las imaginábamos. Aquellas que están llenas de equivocaciones pero que aun así, son capaces de encontrarse un futuro.
Encontrar a tu alma gemela puede ser la aventura más emocionante y dolorosa que te toque atravesar en la vida. En ocasiones no vas a comprender porque tienes que llevarte decepciones o aprender a amar de maneras incondicionales, que te parecen imposibles o poco razonables. Pero lo bonito del amor es precisamente que no pide nada a cambio, y que te incita a hacer locuras.
Hay alguien esperándote en algún sitio del planeta. Quizá a la vuelta de la esquina o puede que al otro lado del mundo. Pero jamás te des por vencido en encontrarle. Porque también te añora y te necesita.