He dejado de ser fuerte
Una vez te dije que te amaba con todo mi corazón y que haría todo lo que estuviese en mi mano para que fueras feliz. No sabes como me arrepiento ahora de esas palabras. Tú no valías ni siquiera un segundo de mi tiempo y hoy me doy cuenta de todo el que desperdicié contigo, creyendo en un amor que solo existía en mi cabeza. Lo que más me duele no es haberme dejado engañar, sino saber que nadie te va a querer como yo, porque a diferencia de los tuyos mis sentimientos eran sinceros. Y los tiraste a la basura.
¿Qué ganabas con burlarte de mí de esta manera? ¿Acaso mi corazón era otro de tus trofeos? ¿O querías que fuera tu diversión? Probablemente nunca me respondas, porque eres tan cobarde que ni siquiera vas a admitir la verdad cuando ya me he dado cuenta de tu engaño. No sabes cuanto lamento haberme encontrado contigo.
Siento lástima por ti, porque solo siendo una persona tan vacía es que puedes tener las agallas de lastimar a alguien que te ama con honestidad. Porque podría apostar a que jamás vas a encontrar satisfacción al compartir momentos románticos con alguien, pues tú no sabes lo que es el amor.
He dejado de ser fuerte solo por ti. Me arrabataste todas esas ganas que tenía de creer en los finales de felices, de amanecer siempre con una sonrisa en el rostro sabiendo que te tengo a mi lado, de compartir todo lo que tenía contigo. Lograste que me derrumbara, reduciste a pedazos mi ilusión. Espero que al menos te satisfaga saberlo, no me siento capaz de amar nuevamente. Supongo que lo único bueno de esto es saber que no voy a cometer el mismo error dos veces.
Gracias por echarlo todo a perder.