Por los amigos verdaderos
El día de hoy queremos deleitarte con una serie de reflexiones dedicada a la amistad, que te harán pensar en todos aquellos momentos que has compartido con esas personas, que incondicionalmente se han mantenido a tu lado con el paso de los años. Por ellas es que hemos pensado en sentimientos y palabras, expresados a continuación. Por el hecho de confiar en alguien sin temor a los prejuicios o saber que siempre existirá la confianza; por los amigos verdaderos.
Cuando no importan las diferencias
Algo sucede de vez en cuando que hace que personas totalmente distintas, se unan para crear un vínculo único y muy especial, que solo se ve fortalecido a causa de las mismas diferencias. Es esa sensación de estar cerca cuando lo necesitamos, sin importar las discusiones o desacuerdos que hubieramos podido tener, sin pensar en como defendemos puntos de vista que no comparten nada en común.
Somos más que un conjunto de ideas que no pueden ponerse de acuerdo, porque a pesar de todo y de todos, seguimos confiando y seguimos creyendo que no hay nadie mejor para compartir las alegrías, o para hablar de nuestros sueños.
Esto es lo que pasa cada momento que surge una amistad sincera. Gracias por estar ahí.
Siempre voy a permanecer a tu lado
No soy una persona perfecta. Estoy consciente de que tengo muchos defectos y también, lo mucho que has hecho estando cerca, soportando cada uno de ellos. Eres por mucho una de las personas más valiosas con las que cuento en la vida y estoy seguro, de que jamás podré encontrar a alguien que sea igual que tú. Es por eso que me resulta tan importante que sepas, que no harán falta las explicaciones cada vez que me necesites, porque siempre voy a permanecer a tu lado.
Aunque a veces tengamos nuestros malentendidos o nos podemos equivocar el uno con el otro. Porque sé que en el fondo siempre hemos estado conscientes, que haríamos todo cuanto este a nuestro alcance por ayudarnos, tal y como de ser. Más que mi amigo, eres una parte importante de mi familia y si alguna vez llegaras a hacerte daño. créeme cuando te digo, que afrontaría hasta las últimas consecuencias para ayudarte a levantar.
No hacen falta palabras
A veces no sé como puedo expresar todo lo que mis amigos me han brindado. Creyendo en mí cuando otras personas, me veían como un caso perdido. Caminando por mí en la oscuridad, en esos momentos en que me sentía sin fuerzas para hacerlo yo mismo. Pienso en las miles de veces que pude terminar mal, por mis decisiones impulsivas y los errores estúpidos que cometí, al no pensar en nada ni nadie más.
Es difícil admitir que has hecho mal, pero mis amigos me enseñaron que hacerlo es parte de crecer. Crecer para ser una mejor persona o al menos intentarlo. Yo solo me sigo preguntando que hice para tener tanta suerte, porque sin duda alguna soy afortunado de contar con gente como ellos.
No hacen falta palabras de ningún tipo para decir lo que he sabido desde hace bastante tiempo: que jamás habrá alguien que como ellos, pueda hacer tanto por mí.
Esos pequeños recuerdos
Memorias y objetos que se quedan ahí para recordarnos que nunca dejaremos de importarle a alguien, así se trate de una sola persona. Sonrisas que se quedan plasmadas detrás de nuestros labios, porque los días en que uno ríe con sinceridad, no dejan de alegrarnos el alma aunque pasen varios años.
Son todos esos pequeños recuerdos los que hacen que conservar una amistad verdadera, valga realmente la pena.