Porque el amor tiene muchas formas

¿Te has puesto a pensar alguna vez en lo grande que puede ser un sentimiento como el amor? La mayoría de la gente insiste en ponerle etiquetas, pero lo cierto es que cuando dos personas se enamoran, importan muy poco las clases sociales, su religión, su raza o su sexo, entre tantas otras características que no deberían ser una limitación. Pero todavía nos cuesta mucho entender lo importante que es hacer a un lado todo esto.

Cuando amas a alguien, le abres una puerta a cosas y circunstancias con las que nunca antes te habías imaginado que ibas a lidiar. Algunas de ellas son maravillosas y otras, son pruebas que tienes que superar para demostrar que realmente amas a esa persona que se ha robado tu corazón. Porque cuando realmente quieres a alguien, no te importa demasiado hacer sacrificios con tal de que sea feliz. No te importa hacer a un lado tu propio bienestar porque sabes que vale la pena.

Y es que el amor tiene muchas formas y se te puede presentar en la que menos esperas. Puede alejarse mucho de lo que considerabas tu tipo ideal de hombre o mujer, y venir con más imperfecciones de las que te imaginabas al soñar.

Es triste darse cuenta de que la sociedad, muchas veces, no ha evolucionado lo suficiente como para aceptar que estas diferencias realmente no son nada, que todos tienen derecho de sentirse amados sin importar por quien o en que circunstancias. Es difícil tratar de luchar contra algo que tú no pediste porque solo sucedió, pero más sentir que te cuesta bastante aceptarlo, por el miedo al rechazo de los demás.

¿Hasta cuando permitiremos que todos esos amores diferentes salgan a la luz? Pese a todo, aún falta demasiado tiempo para que las cosas se pongan en su lugar.